Tal vez Navidad es que cada uno se diga
a sí mismo y en voz muy baja el nombre
de cada cosa, masticando las palabras
con mucho cuidado, para así percibir
todo su sabor, toda su consistencia.
Tal vez es reposar los ojos en los objetos
cotidianos, para descubrir con sorpresa
que ya ni sabemos cómo son, de tanto mirarlos.
Tal vez es un sentimiento, una ternura
que se apodera de todo, tal vez una sonrisa
inesperada en una esquina
y tal vez es todo eso y además la fuerza
para retomar el camino de cada día
cuando el misterio se ha desvanecido y todo
vuelve a ser triste, y lejano, y difícil.

Tal vez Navidad, Miquel Martí i Pol

Nos acercamos al nuevo año y mientras unos deseamos entrar en él con sigilo, el brindis familiar, la manta sobre las piernas, la lectura tranquila de algún texto ya conocido, otros sueñan con celebrar estos días a base de ruido y fiesta, tal vez con la esperanza de exorcizar el miedo que produce el ver avanzar la vida, sin que nada de lo fundamental cambie.

Yo convivo extrañamente con el pánico a un futuro ya escrito y con el temor a perder mi independencia, en un alocado viaje hacia la libertad. Dejaré, como acostumbro, que sea el tiempo el  que decida. No siempre deseo lo que más me beneficia, pero la vida perdona mi falta de criterio y suele ser generosa. En ella confío. 

Los que os acercáis a este blog por estas fechas, ya sabéis que no me gustan las Navidades, pero este año se me han echado encima casi sin darme cuenta. De repente el lunes descubrí que encaraba la recta final del año y había que espabilar si quería replantearme algunas cosas, con la ilusión loca de que una noche puede cambiar un destino.

Soñar deprisa es peligroso y falta solo una semana para que cumpla con el ritual que tan buena suerte me ha dado estos últimos años. Voy a tener que empezar ya mismo: 12 deseos o 1 muy grande… me da que va a ser eso último.

¡Feliz Navidad, socios!

………..

Este año, FNAC, ha convocado un concurso que me gusta. Compro normalmente allí, porque me pilla cerca y porque mi librero pelirrojo consigue cualquier libro que yo le pida (excepto esos que ya no editan porque las editoriales son como son), de manera que este año os voy a dejar aquí los nombres de las novelas que me gustaría encontrar junto a las babuchas y, aunque no es obligatorio, juro que si me toca el premio, estos libros formarán parte de la lista de lecturas de 2012 (y si no me toca, sospecho que también…).
Hoy me gustaría que os animaseis y sugirieseis vosotros alguna lectura que os haya ayudado a entender el mundo, aunque solo sea un poquito.
Mi lista de deseos:

(Algunas de las maravillas de esta lista, me las ha recomendado un vecino de blog. El poema de Martí i Pol y con él, el título del post, lo encontró otra vecina. Mil gracias a los dos. La traducción del poema es mía.)

www.elclubdelosdomingos.com